Rodada en un único plano secuencia, el film tiene como escenario el famoso barrio berlinés de Kreuzberg. Durante 2 horas, la cámara es testigo de todo lo que le pasa a Victoria (Laia Costa), una joven española residente en Berlín. En ese periodo de tiempo conocerá a cuatro jóvenes para los que la noche sólo acaba de empezar y tendrán lugar una serie de acontecimientos que provocarán un giro total en su vida.