Se estrena la polémica y necesaria película brasilera, Aquarius, lo último del director Kleber Mendonça Filho protagonizada por la excepcional Sonia Braga.
Aquarius comienza con la música de Queen y luego la celebración de la tía Lucila, una mujer de 70 años cuya vida admiran niños y adultos de su familia. “Ya no se hacen mujeres como ella”, dirá mucho más adelante Clara, la verdadera protagonista del film, pero eso no es verdad. Clara luchó de joven contra un cáncer de mama y lo ganó, y así se convirtió en una mujer ya mayor pero indudablemente atractiva y sexy, culta y enamorada de la vida. Es Sonia Braga quien le da vida y energía a este personaje que no tiene miedo y no está dispuesta nunca a dejarse vencer en sus luchas. Su presencia es imprescindible y es quien lleva la película a donde su personaje quiere.
Clara se casó, tuvo hijos, pero hoy ellos ya se fueron de su casa y su marido murió hace ya largos años. Vive sola en el último departamento de un condominio que quieren derrumbar para un nuevo negocio que les convendrá a ellos y no muchos más. Pero Clara no sólo se siente cómoda con ese lugar, su hogar, aquel que guarda mil recuerdos de ella y de su familia, donde escucha su incansable colección de discos, baila sola, toma té y escribe en su Moleskine. Su única compañía fija es la mujer que la ayuda, fiel a la señora.
Durante más de dos horas de película, Kleber Mendonça Filho va retratando a este personaje femenino y fuerte a través de su cotidianeidad en un principio, y luego a través de cómo reacciona ante cada adversidad que le van poniendo en su camino para poder quedarse con ese terreno que para ella es impagable. Con humor y mucho corazón, y un uso hermoso (y una presencia funcional muy importante) de la música donde pueden sonar cantautores brasileros pero también Queen.
Luego del prólogo situado a fines de los 70s, Aquarius se divide en tres capítulos (El pelo de Clara, El amor de Clara y El cáncer de Clara). No obstante, además de ser uno de los retratos femeninos más ricos del cine, con una mujer independiente y fuerte que nunca va a dejarse pisar por nadie, pero que no por eso no pueda necesitar de un poco de conexión íntima o la presencia un poco más asidua de sus hijos, Aquarius funciona como crítica de un gobierno corrupto, y de ahí la polémica que desde su proyección en Cannes ha generado (siendo impedida de ser enviada como representante de su país para los premios Oscars).
Aquarius es una película hermosa, con una temática necesaria, que fue merecidamente elegida por el público en el pasado Festival de Cine de Mar del Plata, donde formó parte de la competencia internacional. Un film que funciona a muchos niveles, como retrato de su fuerte personaje femenino y como aquel social y político que lo llevó a estar en boca de todo el mundo. Imperdible.