La película nominada a nueve Oscars, es una de las favoritas para llevarse el premio que todos desean, el de “Mejor Película”. Birdman, gracias a un gran elenco, encabezado por Michael Keaton que le da vida a Riggan Thomson, un actor que luego de haber interpretado a un superhéroe una década atrás decide dirigir, escribir y protagonizar una obra de teatro en Broadway para lo cual debe poner todo su dinero y su vida (mental) en juego. El film está lleno de mensaje y “palos” al mundo teatral, critico y al mundo en sí. Keaton, con un gran desempeño logra ponerte en su lugar, entendiendo toda su frustración y su esfuerzo para poder salir de la sombra de Birdman y poder ser recordado por Riggan Thomson y no por un superhéroe.
Edward Norton, un egocéntrico actor, Emma Stone, la hija “rebelde” de Riggan, Zach Galifianakis coproductor, abogado y amigo de Riggan, Naomi Watts, una actriz debutante que los acompaña en el escenario y Andrea Riseborough, pareja de Riggan y también compañera de escenario, forman junto a Michael Keaton un elenco dinámico que gracias a la mano de Alejandro González Iñárritu no paran un segundo.
Iñárritu (Amores perros) filma de manera genial, con un -falso- plano secuencia, falso porque podemos notar cuando hay cambio de tiempo, porque sino la película debería durar cuatro días, además te dejar interactuar con la mente de Riggan y mete la compañía del sonido de la batería durante casi todo el film.
Entonces, Birdman genera muchas peleas, están los que la disfrutaron muchísimo y los que se aburrieron, no suele haber intermedio. Ojalá la disfruten porque Iñárritu escribe con los argentinos Armando Bo y Nicolás Giacobboneun, además, un poco de humor negro y crisis de los cincuenta nos vienen bien de vez en cuando.