Anne Fontaine tiene una obra muy despareja. En ese contexto, esta adaptación de Blancanieves no está exenta de hallazgos. El humor y la manera en la que el deseo recorre la película es uno de ellos. Otro es el doble rol encarnado por Damien Bonnard, a quien amamos desde Rester vertical (Alain Guiraudie), vista en algún BAFICI