Guiada por la revelación de una vidente, la Condesa Rusa Ivana Malova llega a la Argentina con la intención de criar bellos Chivos de Angora, animales que no son propios del lugar, en un pedacito de tierra llamado Campo Cerezo. Allí viven Doña Juana Cerezo y su nieta Nucha, que acaba de salir de la cárcel en libertad condicional, por haber participado en el robo de las cajas de seguridad de un Banco.