En clave de documental apócrifo, The devil inside parte del aterrador llamado telefónico a la central de emergencias del 911 que María Rossi realizara en 1989 tras haber asesinado a tres personas durante un rito de exorcismo. Desde esta premisa, veinte años después su hija Isabella contrata un pequeño equipo de filmación para retratar el reencuentro con su madre en un hospital psiquiátrico en Roma. Sin esperarlo, ciencia y religión se verán mezcladas e Isabella recurrirá a dos sacerdotes para interiorizarse acerca de los pormenores de las posesiones demoníacas.
El subgénero de found footage que tuvo su gran consagración con “El proyecto Blair Witch” fue tan implementado en los últimos tiempos que ya no siempre resulta efectivo. A pesar de contar con testimonios “reales” de científicos que aportan su mirada (incrédula o confiada) con respecto a los exorcismos, nada en esta cinta termina por convencer demasiado. Que parte de la maldición radique en cierto contagio demoníaco es aún menos convincente. Sin embargo, hay que reconocer que ciertos momentos provocan genuino terror y que a pesar del escaso presupuesto, las escenas de mayor impacto visual están resueltas correctamente.