Del productor ejecutivo de la saga "Actividad Paranormal" (Steven Schneider) nos llega esta propuesta similar dirigida por el no muy conocido realizador William Brent Bell ("Sobreviviendo", título que se lanzó en 2006 directo a DVD), quien se puso al frente de un proyecto cuyo objetivo es asustar pero lamentablemente no logra su cometido.
Filmada íntegramente con cámara en mano, la película -una suerte de falso documental- se desarrolla a fines de 2009, casi 20 años después de un hecho que sacudió la vida de Isabella Rossi (interpretada por la actriz brasileña Fernanda Andrade).
El 30 de Octubre de 1989, cuando la joven tenía 8 años, su madre María (Suzan Crowley) confesó -en la llamada que ella misma realizó al 911- haber asesinado brutalmente a tres personas (dos curas y una monja) durante un exorcismo aparentemente llevado a cabo en su propia casa.
Tras el hecho, la Iglesia se involucró y trasladó a la mujer a Centrino, un Centro Psiquiátrico ubicado en Roma, donde donde la mujer se encuentra apartada para determinar si está mentalmente insana o si está poseída por un demonio.
En la mencionada capital italiana transcurre la historia que sigue a la protagonista durante su investigación, con la que busca conocer la verdad de lo ocurrido esa noche.
Durante su estadía, asiste a diversas clases en la Escuela de Exorcismos del Vaticano (entidad que no autoriza la grabación de este tipo de prácticas), donde conoce a dos jóvenes curas (Simon Quarterman y Evan Helmuth) que realizan exorcismos clandestinos con métodos no convencionales que combinan ciencia y religión.
Ella les pide ayuda para curar a su madre pero en el proceso, todos se enfrentan cara a cara con más de un demonio.
Siempre hay público para este tipo de producciones. La premisa, en sí, no es mala sino que está muy desaprovechada porque "Con el Diablo Adentro" falla en su principal aspecto, la trama, que resulta poco creíble.