Es complicado encontrar una persona en el mundo que odie a Rocky Balboa. Lo vimos tantas veces pelear, caerse y volver a levantarse, que cada golpe nos dolió tanto o más que a él. Algunos pensaban que ver otra película con Rocky no era necesario. Pero estamos en una época en la que la nostalgia nos gana, y cuando vemos films como “Creed” o “Star Wars: El Despertar de la fuerza” nos caemos rendidos ante la necesidad de que nos generen lo mismo que hace muchos años y lo logran.