Caco encuentra a su novia de años en los brazos de otro. Y lo peor es que el otro es un argentino. Y buenmozo. Y un reconocido chef. Y usa pelo largo. O sea lo peor que puede pasar a un brasilero. Vadão, su mejor amigo, intenta sacarlo de la depresión en la cual se encuentra planeando un absurdo viaje en auto hasta Buenos Aires en busca de venganza. Obviamente nada sale de acuerdo con los planes.