Túnez, verano de 2011. Las vacaciones en el sur del país terminan en desastre para Fares, Meriem y su hijo Aziz, de 10 años, cuando el pequeño es disparado accidentalmente en una emboscada. Su lesión cambiará sus vidas: Aziz necesita un trasplante de hígado, lo que lleva al descubrimiento de un secreto enterrado hace mucho tiempo.