Todo está en venta
Compra y venta; pocos otros temas ocupan tanto nuestro interés en estos tiempos regidos por el consumo y donde todo es mercadería. Sin embargo, el de los remates y las casas de compraventa es un micromundo en el que el cine documental no ha curioseado demasiado y que ahora se revela apasionante ante la mirada perspicaz y sensible de este par de jóvenes cineastas -Maito y Mazú eran apenas veinteañeros cuando rodaron el film-. Y no se trata sólo de su habilidad para describir un medio donde todo está en venta -alguien admite que la suya es una actividad en la que se comercia con los afectos de la gente-, sino también a los personajes que lo pueblan, a esa suerte de comunidad que comparten, con sus respectivas historias de vida y los conceptos -dueño, propiedad- necesariamente sometidos a revisión. Todo un éxito.