¿Qué hace falta agregar de esta joyita de la animación cuadro a cuadro, con el sello de Tim Burton? Qué hoy la pueden disfrutar en tercera dimensión. Una manera de hacerle justicia a esta creación de Tim Burton (aunque la dirigió el no menos talentoso Henry Selik), que aquí en su momento no se estrenó en cines.
Lo genial es que, más allá de la novedad en el formato, la historia y los personajes no pierden vigencia, y siguen ganando fanáticos alrededor del mundo. Basta con pasar por un colegio a la hora de la salida y ver jóvenes con mochilas, prendedores y otros elementos de la película.
Siempre es bueno reencontrarse con Jack Skellington, Sally, Oogie Boggie, y el resto de esa pandilla tan alocada. Danny Elfman está en su salsa, logrando una de sus obras cumbres como músico para películas. Lástima que al terminar la producción de El Extraño... él y Burton pelearon por un tiempo, y por eso Elfman no musicalizó Ed Wood (lo hizo Howard Shore).
La conversión a 3D estuvo a cargo de Burton y Selik gracias a un proceso de digitalización cuadro por cuadro made in Industrial Light & Magic.
Para terminar, un anecdotario para impresionar a tus amigos:
* Tim Burton presentó el proyecto de la película (basada en un poema de su autoría) cuando todavía trabajaba en los Estudios Disney. La empresa le compró la idea, pero lo cajoneó para desempolvarlo recién cuando T.B. ya era un peso pesado en Hollywood.
* Al principio la idea no iba a derivar en un largometraje sino en un especial de media hora para televisión.
* La película entró en pre-producción sin haber guión escrito. Para adelantar algo, Danny Elfman compuso las canciones. Los guionistas luego tuvieron que armar la historia alrededor de lo hecho por el otrora líder de Oingo Boingo.
* Burton no pudo dirigir la película porque estaba comprometido para Batman Vuelve. Un film de animación (sobre todo en stop motion) requería mucho tiempo. Pero ya todos sabemos que el resultado final tiene su sello.