Iron Man regresa
Conocido por su inclinación hacia las comedias, David Dobkin (Los Rompebodas) nos presenta una nueva propuesta que lo introduce en el universo dramático, sin dejar de lado el tono cómico que lo caracteriza, principalmente a través de los gags verbales del personaje de Iron Man… digo de Hank.
Hank Palmer (Robert Downey Jr.) es un abogado exitoso que debe regresar a su ciudad natal en Indiana solo para descubrir que su padre, el juez Joseph Palmer (Robert Duvall) es el primer sospechoso de un crimen.
La primera impresión que genera El juez (The judge, 2014) es que posiblemente vamos a encontrarnos con otra de ESAS películas: Personaje exitoso que abandona su pueblo natal para tener que regresar por X motivo, X años después y revolver asuntos de un pasado que tanto tiempo le llevó dejar atrás. ¿Cuántas veces nos encontramos ante esta premisa? Miles, las mediocres No me olvides (Sweet home Alabama,2002) y Todo sucede en Elizabethtown (ElizabethTown, 2005), forman parte de algunos ejemplos de comedias predecibles que siguen este tipo de argumento.
En este caso, el film presenta un giro inesperado: El respetado juez se ve envuelto en un crimen que no recuerda haber cometido, y será el trabajo de Hank defender a su padre y descubrir la verdad sobre los hechos. Lo interesante es que se manejan dos líneas narrativas: por un lado la historia familiar y por el otro, la del enigma policial que se teje en torno al delito y a distintas preguntas que se irán respondiendo principalmente en la instancia del juicio.
Como punto en contra, en vez de concentrarse única y exclusivamente en la relación deteriorada de padre e hijo, también se le da un lugar a la ex novia de Hank (la desaprovechada Vera Farmiga). Una historia que resulta completamente innecesaria y que inclina al film para el lado del culebrón.
Por otro lado, no podemos dejar pasar que Robert Downey Jr. y Robert Duvall no logran salir de su zona confort, y tampoco nadie les brinda esta posibilidad, claro: En el caso del primero, se trata de un Iron Man sin traje, pero igual de exitoso, canchero y millonario que el reconocido personaje de Marvel, y con Duvall, nos encontramos ante el necio y sencillo hombre de pueblo que ya le vimos interpretar en tantas otras ocasiones. De todos modos, logran destacarse en ambos roles, porque se trata de dos actorazos, cuyos personajes tienen como denominador común la “coraza” que forman y que en primera instancia parece inquebrantable, pero por la que es posible entrar y dar como resultado a dos hombres que en el fondo… son puro corazón.
En fin, que tiene sus clichés los tiene, que tiene dos actores que no van a ofrecer fórmulas nuevas también, pero más allá de estos detalles, El juez no deja de ser un film que se destaca por algunos muy buenos momentos y con una seguidilla de giros dramáticos no del todos predecibles.