Este film se destaca no sólo por tener un elenco de primeros actores que nos brindan magistrales actuaciones, brillando Colin Firth y John Hurt, sino que también por tener una soberbia dirección y un brillante guión que lentamente va desenmarañando el relato.
Lo que sí hay que verla bien atento y meterse de lleno en esta historia para no perderse...