Amas de casa y profesionales; casadas, viudas, divorciadas; son todas “muchachas” de entre 47 y 81 años a quienes une su espíritu, por supuesto, pero a quienes también y por encima de todo, las une Elsa, quien a los 87 se encuentra en el que quizá sea uno de los picos de su vida artística. Inspirada en la obra de Pina Bausch, siempre acompañada por su bastón, Elsa dirige el Ballet 40/90, en el que lo hace casi todo, comandando esos ensayos que se extienden por meses en busca de cierta perfección pero también de algo más vital: una pasión.