En busca de un nuevo comienzo después de la muerte de su pequeña hija, Dana y David, junto con sus hijo de 5 años de edad, Lucas, deciden mudarse a la casa rural de sus sueños. Cuando aterradores e inexplicables acontecimientos llevan a Dana a descubrir una llave perdida hace mucho tiempo de una habitación en el ático, accidentalmente libera una gran cantidad de horrores que revelan que el pasado de la casa está terriblemente atado con el suyo. Un historiador de la ciudad le cuenta a Dana que las casas de familia de buena posición económica, a menudo tenía una “sala de decepciones” donde los niños con necesidades especiales o deformidades se podían aislar a fin de no avergonzar a la familia. Dana descubre la impactante historia de un juez que mantuvo encerrada a su hija en la habitación y el espíritu de la deforme y monstruosa niña y el juez, todavía persisten en la casa. Ella empieza a ver este espíritu demoníaco que amenaza a su propio hijo, pero al hacerlo, ella comienza a dudar de su propia cordura.