Esteros: algo entre dos
La película nacional más destacada de la semana se adentra en un tierno romance gay que no fue pero protagonistas tienen una nueva oportunidad.
El cine nacional continúa dándonos películas para reflexionar sobre el amor. En este caso, llega a las pantallas argentinas “Esteros”, una película de Gerardo “Papu” Curotto, que hace dos años estrenó “Matías y Jerónimo”, un cortometraje que ya tocaba la temática gay con personajes que tenían nombres e historias similares a los de este film.
La historia de “Esteros” transcurre en dos tiempos, que el director va utilizando sabiamente para darle mayor profundidad al relato.
Matías regresa junto a su novia brasilera a Santiago del Estero tras una década afuera del país y se reencuentra con Jerónimo, su gran amigo de la infancia con quien siempre hubo una cierta tensión sexual, que él aduce a su condición de adolescente.
Pero lo que Matías niega, Jerónimo lo tiene muy asumido y por eso buscará retomar esa relación aunque más no sea en el plano de la amistad con tal de seguir viendo a Matías.
En el medio, se entremezclan historias de las dos familias de origen de los jóvenes en el que se deja entrever el ámbito socio político en el que se desarrolló su amistad.
El film, a pesar de estar narrado en dos tiempos, utiliza una estructura sencilla para contar este romance, que visto desde ambos puntos de vista está rodeado por un halo propio de las telenovelas, aunque despierta la ternura el espectador en ocasiones.
A diferencia de lo visto el año pasado en “La Noche del lobo”, este film, que aborda abiertamente la temática gay, sí puede ser visto por todo tipo de públicos sin más prejuicio que el de ver una buena historia muy bien contada.