El Papa Francisco lo dijo, así empieza la película de “terror”… Vendrá el anticristo, caminará entre nosotros. Simulará ser Jesús. Una película con todos los clichés, graciosa por momentos. El film nos aclara que Ángela (que buen nombre eligieron) es hija de una prostituta, y a lo largo de la historia se citan y recuerdan todos los pecados que tienen los humanos… y que uno puede ser poseído. Muy buena actuación, correcta de Kathleen E. Robertson. Suma puntos por el final, un final distinto. Y tal vez… ¿con secuela?