El mundo del espectáculo argentino parece haber alcanzado el zenit durante los ’60, ´70 y ‘80, de la mano del teatro de revista. Las marquesinas de la avenida Corrientes lucían los nombres de vedettes y capocómicos hoy legendarios. El Maipo y el Tabaris, entre otros, eran templos de color y maravilla, y el público, los feligreses que formaban largas filas ocupando cuadras enteras.
Para retratar a las figuras de esa época -y de siempre- había una pequeña empresa: Foto Estudio Luisita, compuesta por un trío de hermanas de origen colombiano y un ojo exacto a la hora de conseguir las imágenes adecuadas, en su mayoría hoy inmortales.
Gracias a este documental de Sol Miraglia y Hugo Manso (titulado igual que el estudio), el espectador puede conocer la vida de Luisa, Chela y Rosita: su formación fotográfica de la mano de sus padres, la llegada a Argentina, la ayuda a la madre en los comienzos del estudio, la potenciación de su emprendimiento en el mundo del espectáculo. Entre los testimonios de las protagonistas y de figuras como Amelita Vargas desfilan fotos de íconos como Susana Giménez, Moria Casan, Nélida Lovato, Alberto Olmedo, Jorge Porcel, Juan Carlos Altavista, José Marrone y artistas de la talla de Atahualpa Yupanqui y René Lavand. Además de las fotos originales y de los negativos, las hermanas no tienen problemas en mostrar cómo era el proceso de armar montajes fotográficos de manera artesanal, en los tiempos previos al Photoshop.
El seguimiento a las hermanas en su vida cotidiana, en una casa sencilla -y otrora estudio- ubicada en plena avenida Corrientes, y con la tecnología justa como para sobrevivir, también dan cuenta de un grupo humano cálido y humilde, que aún conserva muy buena relación con las estrellas a las que solían retratar. Además, retrata de relación entre ellas y cómo se complementan en lo personal y profesional. Miraglia también aparece delante de cámara, ya que conoce a Luisita desde hace diez años.
En paralelo, Miraglia y Manso hablan sobre el vínculo entre una familia que también trabajó junta, y entre el pasado y el presente. El eje es la organización de una muestra fotográfica de Estudio Luisita, y cada paso implica un recuerdo, pero sin caer en anécdotas fáciles sobre la personalidad de las celebridades que conocían sino haciendo hincapié en la mecánica laboral y en el uso adecuado de la tecnología analógica.
Con momentos de emoción y gotas de humor, y siempre invitando a la sonrisa, Foto Estudio Luisita es la oportunidad dorada de tener delante de los reflectores a las responsables de estar detrás de los focos, ocupadas en maximizar la imagen de actores y músicos, y sobre todo, de sentarse a tomar el té y mirar fotos junto a personas que aman su profesión.