El documental de Daniel Otero narra la historia de un homicidio sin culpables. En una madrugada de 1994, el subcomisario Jorge Gutiérrez fue asesinado de un disparo en la cabeza cuando viajaba en el tren Roca. Su cuerpo fue encontrado recién cuando el tren terminó su recorrido. Todo sucedió en una época particularmente oscura de la historia argentina en la que la justicia no encontró ningún culpable y en la que los lazos del crimen con importantes personas de la policía y empresarios eran muy fuertes.
Con entrevistas a los familiares de la víctima, entre ellos su hermano Francisco Gutiérrez (quien fue hasta hace poco intendente del Partido de Quilmes), a un testigo del crimen, a un juez y a distintas personas que han sido afectadas por la grave crisis de los noventa, Otero se decide a relatar lo ocurrido y mostrar con detalle las conexiones entre cada uno de los personajes de la historia.
El contexto en el que el crimen de Gutiérrez ocurrió es clave para entender qué pasó y por qué. Por esta razón, el principal punto fuerte del documental es el gran uso que hace de material de archivo de esos años. Se pueden observar fragmentos de programas de televisión con periodistas como Marcelo Longobardi y Luis Majul, filmaciones de discursos del ex presidente Carlos Menem y el entonces Ministro de Economía Domingo Cavallo, y videos de represiones y marchas. Todo este material ayuda a refrescar la memoria y darle mayor fuerza a los hechos.
Otero, quien también escribió el libro Maten a Gutiérrez, vuelve a traer al presente un crimen sin culpables. G. Un Crimen Oficial muestra a una justicia que no cumplió con su cometido a la vez que pinta un claro retrato de la Argentina de los noventa de la mano de quienes vivieron esa época: víctimas y victimarios. Pero el punto central es la muerte de Jorge Gutiérrez y la búsqueda de justicia por su asesinato.