Viviane Amsalem se separó hace años de Elisha, su marido, y ahora quiere un divorcio legal para no convertirse en una marginada social. En Israel, el divorcio sólo es posible si el marido da su consentimiento. Sin embargo, Elisha, no está dispuesto a aceptarlo. Viviane tendrá que luchar ante el Tribunal Rabínico para lograr lo que ella considera un derecho. Así se verá inmersa en un proceso de varios años en el que la tragedia competirá con lo absurdo y absolutamente todo se pondrá en tela de juicio.