El cordobés Cristian Jure (Alta Cumbia, Pepo: la última oportunidad) presenta Gracias Gauchito, la primera ficción basada en la figura religiosa del Gauchito Gil.
Antonio Mamerto Gil, conocido popularmente como el Gauchito Gil, es una figura religiosa. Nació en 1840 -en plena época de guerra entre unitarios y federales- en Par Ubre, un pueblito de la provincia de Corrientes. Murió el 8 de enero de 1878 tras ser condenado por desertor. Algunas versiones dicen que lo fusilaron, otras que lo degollaron. Según los creyentes, el Gauchito es capaz de conceder salud, dinero y trabajo a quienes le recen. De hecho, cada 8 de enero, su santuario principal es visitado por casi 200 mil peregrinos.
Sobre quién fue realmente el Gauchito Gil hay muchas versiones encontradas. Para Gracias Gauchito, Cristian Jure se basa en el libro Colgado de los tobillos de Orlando Van Bredam, aunque le realiza algunas modificaciones. En esta ocasión, el cineasta no se enfoca en los milagros que presuntamente es capaz de realizar esta figura religiosa sino que se enfoca en el lado más humano. Jure ahonda en los valores que tenía el Gauchito Gil: una especie de Robin Hood de Corrientes.
Para agregarle más profundidad al lado humano de Antonio Mamerto Gil, el director también habla sobre el amor. Gran parte de la trama, por no decir que básicamente toda, girará en torno a la relación que el Gauchito mantiene con Dolores, la esposa de Juan de la Cruz Salazar, su perseguidor y verdugo. Esto, aunque esté muy relacionado con el primer milagro del Gauchito, hace que la trama pierda fuerza y por momentos se vuelva monótona.
Para contextualizar sobre las hazañas del Gauchito Gil, y también sobre la situación histórica en general, una voz en off acompañará a lo largo de todo el relato. Hacia el final de la película se descubrirá quién es realmente esa persona que (nos) cuenta.
Gracias Gauchito funciona como un homenaje, pero también como un repaso por parte de la historia argentina. Quiénes fueron los unitarios y quiénes los federales, qué actos cometió cada grupo y en nombre de qué. Con el personaje del Gauchito como excusa -a raíz de ser desertor-, Jure se aleja de estos bandos y marca sólo uno como camino correcto: el del protagonista. El cineasta, en todo momento, busca mostrar al Gauchito como un héroe de la historia.