Diego Peretti protagoniza Iniciales S.G., la nueva película de Rania Attieh y Daniel García. Se trata de una tragicomedia que va perdiendo el gusto con el correr de los minutos.
Diego Peretti interpreta, en esta ocasión, a Sergio Garcés, un actor de 50 años que se comporta como un joven de 20. Su sueño es convertirse en un actor reconocido, pero no consigue más que papeles secundarios. Muchas veces debe recurrir a participar en películas pornográficas para poder llegar a fin de mes. Entre mucha droga (principalmente marihuana) y alcohol, Sergio pasa sus días como si no tuviese ningún tipo de responsabilidad, hasta que su vida da un giro de 180°. Un crimen inesperado y la llegada de un romance no solicitado amenazan con romper su tan arraigada rutina.
Como menciona el protagonista en un momento, la suerte en su vida depende de cómo le va a la selección argentina. Iniciales S.G. nos sitúa durante el Mundial 2014, cuando Argentina llegó a la final. Todos sabemos cómo termina esa historia. Es por eso que no es difícil anticipar cómo será el futuro del protagonista. Frente a una racha de ¿buena suerte? (aunque la realidad es que no tanto) todo termina desmoronándose por completo y, por primera vez en su vida, debe aceptar que los 20 años quedaron atrás hace mucho tiempo.
Diego Peretti es un camaleón dentro de la actuación. Ya demostró, decenas de veces, poder adaptarse al papel que tiene enfrente. Su interpretación en esta entrega no es la excepción. En todo momento logra convencernos de ser ese típico “pendeviejo” que genera tanto cariño como rechazo. Su papel es, definitivamente, lo más destacable de esta película. El carisma que tiene ante las cámaras ayudan a salvar (o mejorar) cualquier película, por más mala que sea la trama que se plantea.
Iniciales S.G. juega entre la comedia y el drama constantemente, aunque su fuerte realmente está puesto en la comedia. Al menos en esos momentos es en donde mejor funciona la película. El drama en sí se siente algo forzado y tirado de los pelos (sobre todo en lo que respecta a ese “crimen inesperado”). En esos momentos la película se desvirtúa bastante y la trama se va perdiendo entre un intento de halo de misterio que, finalmente, resultado sobreexplicado en cada escena.
Iniciales S.G. es una tragicomedia con sabor a poco. La película va de acá para allá y la resolución del conflicto resulta inverosímil y torpe. Lo más destacable es, una vez más, la actuación de Diego Peretti, quien nuevamente demuestra ser un camaleón y adaptarse a lo que venga.