Todos aquellos que esperen de La Carretera (The Road, 2009) una suerte de western apocalíptico saldrán sumamente defraudados de la sala: más bien estamos ante un drama humanista que por ambientación se acerca a los relatos más amargos de postguerra. Muy lejos de la parafernalia hollywoodense aunque recuperando todos los lugares comunes del formato, la película apenas si propone un viaje mínimo de supervivencia que demarca la delgada línea que separa a la fuerza vital del colapso psicológico. La gran actuación de Viggo Mortensen compensa los tropiezos de Kodi Smit-McPhee y le da sentido a un film bastante lánguido que en manos de un equipo creativo más talentoso podría haber sido extraordinario…