La comedia del año. Enteramente construida de guiños y perversamente inteligente, la meta-narrativa aqui se pregunta si un juguete debe ser usado siguiendo las instrucciones o llevados por la creatividad e imaginación del jugador, después de todo la pequeña belleza de los Legos es esa, están diseñados con un especifico propósito pero abiertos a un mundo de re-interpretaciones. The Lego Movie es efervecente y su frescura se permite también hacer un comentario acerca de la vida pre-fabricada que en muchos casos vivimos sin darnos cuenta. Chistes y puns sin respiro es la mejor manera de hacernos olvidar que se trata de un comercial de 100 minutos.