La leyenda de Hércules

Crítica de Ramiro Ortiz - La Voz del Interior

El lado rubio de la fuerza

La leyenda de Hércules convierte al héroe griego en un personaje que hará lo posible para liberar a un pueblo, superar escollos y quedarse con la chica.

Si en imdb.com, la base de datos de cine a la que recurre medio mundo, encuentra a esta película con una baja calificación de los usuarios, no se quede con la primera impresión. Renny Harlin es un director con una carrera muy particular en Hollywood, y el público norteamericano probablemente tiene una visión muy teñida por eso. Concretamente, es una especie de ídolo caído de la industria. Este finlandés emigrado estuvo en la cúspide cuando dirigía películas como Duro de matar 2 y estaba casado con Geena Davis, una chica del momento. Pero dio algunos pasos en falso y entró en ese triste mito del talentoso malogrado del que aparentemente no pudo salir. Para colmo, en este 2014 tiene que enfrentar un nuevo caso de competencia a cara de perro dentro de Hollywood. Dos películas con casi idéntico tema que se enfrentan por el mismo público. Esta Hércules que acaba de estrenar, y otra que protagoniza Dwayne Johnson, John Hurt y Joseph Fiennes y dirige Brett Ratner, con más espalda gracias a la presencia de dos majors como Metro Goldwyn Mayer y Paramount por detrás.

Sin embargo, La leyenda de Hércules es una película entretenida, y para el que va al cine a que le cuenten bien una historia eso es bastante. Comienza en la cuna de este personaje de la mitología griega y recrea la historia de este hombre, hijo de Zeus "el dios de dioses" y una reina mortal, que sea cría entre la desconfianza de su padre y los celos de su hermano. Luego, por imperio del amor compartido con Hebe, a quien quieren obligar a casarse con el que debería ser su cuñado, se ve obligado a enfrentar a su dinastía en una revolución campesina contra la opresión gobernante.

Quizás hay detalles que harían mejor esta película, pero se las arregla para disimularlo y a medida que el metraje avanza lo hace mejor. Como esas personas que caen mejor cuanto más se las conoce. O esa ropa sin marca que da los mejores resultados.

La distinción, la poesía y el romanticismo de algunos diálogos le dan un contenido especial al filme de Harlin. Las buenas escenas de acción en varias oportunidades hacen de la simpleza su secreto. Si hasta se nota que quisieron hacerla lo más grandiosa posible, gastando el último centavo del costo de la forma más ingeniosa.

Además, cuenta con buenas actuaciones, entre ellas la de Scott Adkins, como Anfitrión. Buena fotografía y diseño de arte, con varios de los recursos que patentó antes la exitosa 300 (en camino a convertirse en un ícono del género) hacen de La leyenda de Hércules un filme de aventuras y acción épica para tener en cuenta a la hora de elegir qué ver de la cartelera.