Lo que oculta nuestra ciudad
"La multitud" es un documental que intenta ubicarse como testigo de hechos que dan cuenta de las inquietudes, o negaciones, de quienes han gobernado la Argentina en las últimas décadas.
El siempre cambiante paisaje urbano de Buenos Aires, esconde innumerables zonas, sectores, o predios, que hoy están abandonados y otros que sorprenden al mostrar un vertiginoso cambio en su superficie, como sucede con el pujante Puerto Madero, o la deteriorada Costanera Sur.
"La multitud" es un documental que intenta ubicarse como testigo de hechos que dan cuenta de las inquietudes, o negaciones, de quienes han gobernado la Argentina en las últimas décadas.
LOS CONTRASTES
El director Martín M. Oesterheld ofrece una propuesta curiosa. Su filme prácticamente es mudo, salvo al final cuando, mediante traducción con subtítulos, se ve dialogar a dos inmigrantes rusos, un hombre y una mujer, en uno de los departamentos de los monoblocks, de Villa Lugano.
Película de contrastes, el director muestra el estado de destrucción que hoy presenta la ex Ciudad deportiva de Boca, en la Costanera Sur, diseñada en la década de 1960: y al costado de ese predio, a la actual Villa Rodrigo Bueno, que cada vez se ha extendido más y en la que habita mayoritariamente gente del interior, o inmigrantes.
Poco después el cineasta establece otro paralelo, entre el ayer y el hoy, al filmar el derruído Parque de la Ciudad y su gigantesca "torre espacial", de doscientos metros de alto. Inaugurado en 1982 en el barrio de Villa Soldati y clausurado y vuelto a reabrir y cerrar en distintas oportunidades.
Este espacio también es parte de un agresivo contraste con el paisaje,
conformado por un gigantesco depósito de autos apilados como si fueran chatarra, ubicado a pocos metros de la Villa 20, en la zona de Villa Lugano.
ARQUITECTURA VIVA
Exhibida en la edición 2012, del Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (Bafici), en la sección Cine y arquitectura, el documental de Oesterheld, que es artista plástico y cineasta, es una propuesta que, en apariencia, debe mirarse como si fuera un cuadro en movimiento, cuyas formas, perspectivas, diagonales y paralelas se van modificando de acuerdo al ángulo en el que se ubica la cámara.
"La multitud" provoca cierta extrañeza en el que observa y la ausencia de una narración en off, o de escritura gráfica, que ubique al espectador, en el lugar en el que se encuentra lo que se muestra, la vuelve algo hermética para quien no conoce la ciudad.