La Noche del Lobo: aullando por lo bajo
La odisea nocturna de un joven al que su pareja echó de su casa el lei motiv de unapelícula que apuesta a sorprender por lo osada más que por la historia que narra.
El cine de temática gay va ganando más y más espacios dentro de los estrenos nacionales, a veces con grandes productoras por detrás como la recordada "Muerte en Buenos Aires" y otras con films menos ambiciosos como esta "La Noche del Lobo" que apuesta más al volumen de los aullidos que la calidad de los cuadrúpedos en cuestión.
La historia de esta película gira en torno a Ulises, un joven taxi boy al que su pareja, Pablo (Nahuel Mutti, ¡sí el de "Verano de ´98"), echa de la comodidad de su hogar, vaya uno a saber porqué causa principalmente porque lo "vive": no trabaja y le vacía la heladera, en pocas palabras.
Tras orinarle y defecarle la cama a Pablo, Ulises le roba un arma y algo ediner, y sale a buscar un nuevo lugar donde quedarse. Deambulando por la noche porteña termina atravesando muchas situaciones que lo pondrán a prueba mientras recuerda los bunos momentos que pasó con su ex pareja, que al mismo tiempo lo está buscando para recuperar sus pertenencias.
El film consta de una sucesión de escenas que se alternan entre las desventuras nocturnas de protagonista y su propia introspección, en la que revive su pasado junto a Pablo.
Sin embargo, y a pesar de la buena elección del desconocido Tom Middleton en el rol conductor de la trama, el film no logra transmitir las muchas sensaciones que tiene para entregar, es decir que no se termina de entender qué les está pasando emocionalmente a los protagonistas, problema que deriva de un guión que busca redondear la historia en los exactos 70 minutos de duración.
De esta manera, la Odisea nocturna que vive este Ulises no logra ser lo suficientemente atractiva para trascender el nicho de público al que está dirigida en primer término.