Tras el suicidio de una persona que en sus últimos minutos sobre esta Tierra se aferró a un rosario, la policía de Filadelfia es llamada para investigar el caso. Quiere la casualidad –o tal vez no- que en el mismo edificio ocurra un suceso extraño. Un ascensor ha quedado atorado en el piso 21 sin presentar fallas electrónicas o mecánicas aparentes. Sus ocupantes, cinco personas diametralmente opuestas entre si, comienzan a experimentar la presión del encierro, sensación desagradable que va in creyendo cuando tras cada uno de los cortes de luz, uno de ellos aparece brutalmente asesinado. Uno de los guardias que controla las cámaras de seguridad, un mexicano religioso, supersticioso y bastante vulnerable recuerda una de las historias que le relataba su madre cuando él era pequeño. En aquel cuento, el diablo tomaba forma humana y reunían a personas de malas conductas para una última tortura antes de llevárselos consigo al otro mundo. ¿Será esto lo que está ocurriendo dentro del ascensor? ¿Uno de estos cinco personajes será el diablo corporizado?
Este film es la primera entrega de un proyecto aún más grande y ambicioso conocido como “The Night Chronicles” impulsado por el devaluado director M.Night Shyamalan que supo ser el creador de grandes éxitos como Sexto Sentido y Señales, que en esta oportunidad ocupa el rol de productor. El realizador propone crear una serie de films de temáticas que van del terror al suspenso pasando por los tintes sobrenaturales. En esta primera oportunidad, el ritmo y la tensión se mantienen a lo largo de los casi ochenta minutos que dura el film, que de haber prescindido del lado demoníaco, también podría haberse erigido como una historia de suspenso con malos de carne y hueso.