De una manera violenta y emotiva le decimos adiós a Wolverine en la pantalla grande. El tercer y último film de este personaje en solitario, marca la despedida del australiano Hugh Jackman como el mutante que saca sus garras de adamantium y que ha interpretado durante 17 años (9 películas en total).
La producción dirigida por James Mangold (“Johnny y June: Pasión y Locura”), responsable de la anterior entrega,”Wolverine: Inmortal” (The Wolverine, 2013) está basada en la serie de ocho comics titulada “Old Man Logan” (El Viejo Logan), que se desarrolla en un futuro en el que el protagonista está más viejo, cansado física y psicológicamente, lleno de cicatrices y con sus poderes regenerativos desvanecidos casi por completo.
La historia, que casi nada tiene que ver con la creación de Mark Millar y Steve McNiven por un tema de derechos de los otros personajes del Universo Cinematográfico de Marvel, toma lugar en 2029 y los mutantes ya no existen… o están a punto de extinguirse. Un solitario y desesperanzado Logan pasa sus días tratando de pasar desapercibido, bebiendo alcohol y ganando unos cuantos dólares como chofer de una limusina de alquiler.
Sus compañeros de exilio son el marginado Caliban (Stephen Merchant) y un muy enfermo Charles Xavier (Patrick Stewart), quien sufre de Alzheimer y está postrado en una cama. Ellos tres viven en un escondite que se encuentra en una zona remota de Nuevo México. Es el propio Profesor X quien le pide a Logan que ayude a una niña extraordinaria hasta lograr ponerla a salvo.
Esa jovencita es la salvaje Laura Kinney (estupendo trabajo de Dafne Keen, hija del actor Will Keen), más conocida como X-23, quien tiene las mismas habilidades que Logan. Recordemos que una pista del clon femenino de Wolverine fue presentada en la escena post créditos de “X-Men: Apocalipsis” (X-Men: Apocalypse, 2016).
En esta misión de vida o muerte, el trío se enfrenta a dos villanos: el asesino cibernético Donald Pierce (Boyd Holbrook) y su aterrador ejército de androides -llamados Reavers- y el genetista Zander Rice (Richard E. Grant), sobre quienes no voy a revelar los motivos por los cuales quieren cazar a la niña.
Recordemos que la película tiene una calificación para adultos, lo cual permite que esta entrega sea muchísimo más sangrienta que las anteriores. Con elementos de road movie y western moderno, “Logan” desarrolla una historia original creada por el propio Mangold y David James Kelly para contar -por un lado- los orígenes de X-23, y para cerrar y consumar -por el otro- el crudo destino de este hombre sufrido desde un aspecto más humano, lo cual hará que algunos espectadores se emocionen.