Lisergia y mariposas de madera
El mundo creativo de Miguel Abuelo fue enorme, como una gran mamushka sin fin. Cuando surgió la primera separación de Los Abuelos de la Nada, allá por el año 1969, Miguel toma la decisión de viajar a París junto a otros músicos- el guitarrista Daniel Sbarra; el bajista Pinfo Garriga; el baterista Diego Rodríguez; y el chelista Carlos Beyris-. La idea era grabar el disco solista de Abuelo, aunque terminó, por un corto tiempo, consolidándose como banda. Allí grabaron “Nada”, un disco que conceptualmente se diferencia de la música que Miguel venía haciendo y que realizó posteriormente con la fama de Los Abuelos a cuestas. En “Nada”, que finalmente salió en 1975, predomina una oscuridad y algunos pasajes lisérgicos que dan cuenta de la época en la que el amor libre, el hipismo y las drogas blandas, predominaban la escena rock del mundo.
En Miguel Abuelo et Nada, el documental (2018), los directores hicieron un gran trabajo de investigación para buscar a diferentes fuentes que estuvieron en la gestación de ese disco o se sumergieron de lleno en ese mundo de fantasía y rock en clave psicodélica.
Además de los músicos mencionados, a excepción de Diego Rodríguez, aparecen distintos amigos como el director Víctor Kaselman, el pintor Ricardo Mosner, la actriz y música Elizabeth Wiener y el poeta Pipo Lernoud, quien cuenta el origen de la letra “Estoy aquí, parado, sentado y acostado”, que se encuentra en el disco. Además, también se encuentran las opiniones e historias contadas por los periodistas Alfredo Rosso y Juanjo Carmona, autor la biografía del cantante.
Por otro lado, en una grabación de archivo, aparece Moshé Naim, productor del long play que habla con total devoción sobre la figura de Miguel y de cómo interactuaban todos los músicos entre sí.
No hay muchas imágenes de archivo, pero las pocas que se encuentran, que fueron colocadas de manera estratégica, cumplen para poder imaginar la época en la que transcurre la historia. Lo más curioso de la historia, es que el “Nada” nunca se editó en Argentina y recién hacia finales de los 90 se dio a conocer en este continente.
El documental se centra en contar la creación de uno de los discos de culto más extraño y bellos de la primera etapa del rock nacional, poniendo en foco todo el espectro creativo y en cómo un grupo de músicos atrevidos pudo ir contra la corriente.