El cine tiene pocos subgéneros tan poco afines al público infantil como las películas sobre fraternidades universitarias. Las fiestas repletas de alcohol y sexo suelen ser los platos fuertes de las películas. Por supuesto que nada de eso puede encontrarse entre las chiquilinadas de Monsters University, precuela de aquel éxito de Pixar de la década pasada. La película es otra buddy movie donde el nerd Wazowski y el juerguista Sulley deberán llegar a un acuerdo si quieren recibirse y volverse asustadores profesionales. A Pixar le siguen funcionando los mismos mecanismos narrativos de siempre, pero tal vez ya sea el momento de que el estudio de Disney aprenda trucos nuevos.