Buenas compañías
Museum Hours transcurre en el invierno de Viena y es fantástica. Es la historia de un guardia de una sala dedicada a Brueghel dentro del Museo de Historia del Arte que traba amistad con Anne, una mujer de unos 50 años que acaba de llegar a Viena a "cuidar" (si cabe la palabra) a Janet, una amiga de su infancia que yace en estado de coma en un hospital de la ciudad. Anne -que viene de Montreal- casi no tiene dinero y menos amigos en esa ciudad, por lo que la amistad que traba con el guardia es inevitable. Cohen la filma evitando todos los clichés esperables (por ejemplo, el romance entre ellos, que el director elude con mucha fineza), pero sin hacerle el quite ni por un minuto a la emoción genuina de dos personas necesitadas.
Como si fuera poco, además la película se permite reflexiones muy lúcidas (casi como de contrabando) sobre el museismo, la historia del arte y el sentido del cine. Un gran film.
PD: No será raro encontrar críticas que hagan paralelos con Antes del amanecer, de Richard Linklater. No los culpo: es Viena y es una pareja que conversa mucho y disfruta del gentil arte de conocer a otra persona.