Ya muy lejos del ratpack la saga Ocean’s se adentra en una nueva serie protagonizada por un -casi- integro elenco de grandes actrices: Sandra Bullock, Cate Blanchett, Rihanna, Anne Hathaway, Helena Boham Carter, Mindy Kaling, Sarah Paulson y Awkwafina, estan listas para realizar un nuevo robo.
Ocean’s 8 es simple comparada a sus entregas previas, hay un plan y hay un equipo pero la nueva película de Gary Ross (Seabiscuit, Free State of Jones) se concentra, y tal vez demasiado, en el ofrecer un panorama extenso del objetivo. Esto es un gran punto en contra ya que la saga Ocean’s posee el encanto de mostrar un ambiente de lujo y empapar al espectador en él. Esta nueva película quita de lado el encanto del planeamiento y su ambiente – lamentablemente también el desarrollo de personajes – para ofrecer un espectáculo que se basa solo en “el motivo del robo”. Ocean’s 8 es pura y exclusivamente personal y no logra sorprender en ningún momento.
Entre el enorme talento de su elenco, la película carece de química actoral, esa camaradería que vimos en las anteriores películas, aquí es inexistente. A pesar de la indudable experiencia de estas divas del séptimo arte, la película funciona como una seguidilla de monólogos que no logran interconectarse – casi – en ningún momento. Se destacan Bullock, Blanchett y en una escena particular Hathaway, pero el resto simplemente no está en sintonía con el plan pactado. El colmo: el personaje de Sarah Paulson no logra definir su especialización y en la película la tenemos como un simple “haz lo tuyo Paulson!”.
Con un ritmo sorprendentemente desfasado para el género Ocean’s 8 opera como un nuevo intento de renovación. Es interesante ver a estas grandes actrices compartiendo en pantalla y es todavía más interesante el cuestionamiento sobre la eficacia de este nuevo grupo; afortunadamente la calidad total del film no consigue decepcionar del todo y sin dudas se agradece el intento, pero las piezas de este nuevo juego cinematográfico no encajan del todo y la experiencia no logra llegar al nivel que se prometía, o al menos, que intentaba distinguir. ¿Innecesaria?- No. ¿Una perdida de tiempo?-Tampoco; es más, las posibilidades que ofrece a futuro esta spinoff son muchas y si se instala en buenas manos, tal vez en algún futuro nos encontremos con Ocean’s 21… Valoración: Buena.