Basado en un caso real, “Por gracia de Dios” hurga en el derrotero de un padre de familia, con cinco hijos, que quiere hacer justicia contra Breynard Preynat, un sacerdote pedófilo que había abusado de él cuando era un pequeño boy scout. Su afán por revelar la verdad lo llevará a encontrar otras víctimas. El director Ozon, el mismo de “La piscina”, “8 mujeres” y “Joven y bella”, es un especialista en exponer las particularidades de los vínculos y en mostrar las virtudes y miserias de los recovecos más intimos de sus criaturas. Eso sucede en esta trama ambientada en Lyon, que es un relato coral sobre tres casos puntuales con un denominador común: un sacerdote que sigue impune y la Iglesia que hace lo imposible para no quedar manchada. Quizá la película era más efectiva con media hora menos, pero vale hurgar en la luz que asoma en los momentos de oscuridad.