“El Sinsajo Vive”. La primera de las dos partes que componen la adaptación cinematográfica del tercer y último libro de la trilogía literaria escrita por Suzanne Collins, y cuyo estreno en la Argentina es un día antes que en los Estados Unidos, llega finalmente a nuestra cartelera cinematográfica para que podamos ser testigos de la rebelión que estaba comenzando a gestarse contra el Capitolio en la segunda entrega “Los Juegos del Hambre: En Llamas” (2013) cuando Katniss y Peeta realizaban el “Tour de la Victoria” por los distintos distritos de Panem.
“Los Juegos del Hambre: Sinsajo – Parte 1? se inicia inmediatamente en los momentos siguientes donde finalizó su predecesora, en la que Katniss Everdeen (Jennifer Lawrence sigue brindándonos una convincente labor actoral), fue rescatada del arena del Vasallaje de los Veinticinco, lo cual no fue casual, como tampoco lo fue que llevara tiempo formando parte de la revolución sin saberlo.
Tras destrozar los Juegos para siempre, la protagonista se encuentra, junto a su madre (Paula Malcomson), su hermana Primrose (Willow Shields) y su mejor amigo Gale (Liam Hemsworth) a salvo en el Distrito 13 (el cual sí existe), dado que el 12 -de donde proviene ella- no es nada más que montañas de escombros debido a los recientes bombardeos.
El 13 es un bunker subterráneo (¡algo que provoca claustrofobia!) que aloja a la población rebelde de Panem y que se ha convertido en el centro de operaciones comandado por la presidente Alma Coin (Julianne Moore) y su asesor Plutarch Heavensbee (el fallecido Philip Seymour Hoffman en su último trabajo; de hecho, el film está dedicado a él), personaje que conocimos en la segunda entrega.
Allí, ambos intentan convencer a “la chica en llamas” de convertirse en el símbolo de la rebelión (el Sinsajo), ya que ella es capaz de incitar a los ciudadanos de los distritos restantes a enfrentarse al totalitario presidente Snow (como siempre un imponente Donald Sutherland). Mientras ella extiende sus alas, lucha por salvar a Peeta Mellark (Josh Hutcherson), quien fue secuestrado por el Capitolio, junto con Johanna (Jena Malone) y Annie (Stef Dawson), la novia de Finnick (Sam Claflin).
La trama, por momentos un poquito lenta (salvo cuando se encamina hacia el abrupto final debido a la división en dos partes con fines comerciales), deja de lado la famosa competición desarrollada en los primeros dos filmes, en la que “tributos” se mataban unos a otros para sobrevivir para avanzar en un concepto más profundo de la revolución. La misma, avanza fundamentada en la propaganda política/mediática, tanto de un lado como del otro.
Mientras Katniss (furiosa y al mismo tiempo quebrada por lo que ven sus ojos), acompañada por un equipo de custodia y filmación compuesto por Gale, Boggs (Mahershala Ali), Cressida (Natalie Dormer), Messalla (Evan Ross), Pollux (Elden Henson) y Castor (Wes Chatham), es enviada a zonas de guerra a grabar videos de propaganda (llamados propos) con el propósito de encender la llama de la revolución, a Peeta (muy cambiado y flaco) se lo ve en una serie de entrevistas a cargo de Caesar Flickerman (Stanley Tucci) “sugiriendo” por el cese de fuego.
Al momento, esta película dirigida espléndidamente por Francis Lawrence, que comienza a adentrarse en un contexto más oscuro, sobre todo político, no es la mejor de las tres en el aspecto general. Eso no significa que no sea buena ni que no estemos esperando ansiosamente qué es lo que sigue en la próxima entrega de la franquicia programada para fines de 2015.
Como siempre, el elenco liderado por la talentosa J-Law realiza un destacado trabajo, al igual que el resto de sus compañeros; en algunos de ellos es en donde recaen los dos o tres toques de humor que “Sinsajo 1? incluye para descontracturar un poco la matanza (obvio que me refiero a Elizabeth Banks como Effie, ahora despojada de toda su ropa, maquillaje y pelucas, y Woody Harrelson como Haymitch).