Si se piensa en el plato argentino por excelencia, se piensa en el asado. Había mucho para contar al respecto en una película y, luego de años de investigación, la dupla Mariano Cohn-Gastón Duprat lo hizo realidad gracias a Todo sobre el Asado.
Con el humorista Negro Álvarez como protagonista y narrador, este documental traza un recorrido por todas las figuras que intervienen en el asado: desde las vacas hasta un sommelier de asado, pasando por el empleado de un matadero, asadores, empresarios, psicólogos y, por supuesto, comensales. Vacío, tapa, chorizo, ojo de bife, matambre, chinchulín, molleja, ningún componente de esta comida queda fuera de análisis. Y lejos de ser elitista, la cámara se adentra tanto en las parrillas de restaurantes de renombre como en las que improvisan un grupo de obreros de construcción.
Como en sus documentales anteriores y en sus films de ficción –El Ciudadano Ilustre (2016), por nombrar el más reciente-, e incluso en programas de televisión que supieron crear (Cupido y Televisión Abierta, entre otros), Cohn y Duprat se valen de una temática o de una situación para indagar en la condición del ser argentino de hoy y de siempre, permitiendo apreciar diferentes puntos de vista. A través de la sucesión de personas (algunos más públicos que otros) surgen momentos desopilantes, emotivos, sorprendentes, siempre interesantes. ¿Es el asado parte esencial del ciudadano criollo? La filmación casera de un niño chiquito probando un bocado por primera vez, sumado a la celebración de los adultos detrás de cámara, ya dice algo. Además, los directores no temen derribar mitos y creencias acerca del origen de la preparación del asado; algunas revelaciones resultan impactantes.
Todo sobre el Asado no sólo llena un vacío (he aquí un acertado juego de palabras) al dedicarle un largometraje a este plato emblemático, sino que es una excusa para hablar de los argentinos -y de buena parte la condición humana toda, a la hora de cocinar, de comer y en la vida en general.