12 horas para sobrevivir

Crítica de A. Degrossi - Cine & Medios

Antipurgante

Si la primera entrega al menos se apoyaba en reconocidas premisas filosóficas para acabar sentando las bases de una nueva franquicia, esta segunda parte ya da todo por sentado y va directamente a la explotación de la trama que seguramente dará lugar a más películas.
La acción transcurre en 2023, es la sexta purga que se realiza desde que los nuevos padres fundadores tienen el poder en los Estados Unidos y todos los que no desean participar toman las medidas para estar seguros en sus casas. Los otros se preparan para matar, sin sufrir consecuencia legal alguna.
La distribución de la riqueza por medio de la matanza anual ya tiene detractores. Esa es la novedad que presenta esta entrega, un grupo "contra", pero que dirime esa diferencia por la vía armada, como corresponde en el gran país del norte. Por otra parte, el filme sigue a un vengador solitario, un sujeto que solo quiere saldar cuentas con un tipo en particular pero que en el camino se encuentra ayudando a algunos que quedaron en medio de la noche a la deriva, sin protección. A diferencia del primer filme, donde todo transcurría en un barrio cerrado, esta vez la acción sucede en las calles de la ciudad y con los ciudadanos menos favorecidos como protagonistas.
La película es un festival de lugares comunes y obviedades, con discursos berretas para hablar de la diferencia entre los que tienen y los que no, con ruido de metralleta de fondo. Ojo con esto, el cine no se hace con inocencia, siempre lleva un mensaje, en este caso siniestro pero afortunadamente hecho por un petardista sin demasiado talento.