La noche de la expiación, un film independiente con Ethan Hawke, sorprendió el año pasado en la taquilla norteamericana.
Filmada con un presupuesto de tres millones de dólares y una ínfima campaña publicitaria, la película recaudó casi 90 millones de dólares.
Esto motivó que meses después del estreno el director James DeMonaco se pusiera a trabajar en la segunda entrega y es en este punto donde nos encontramos con un caso bastante loco.
12 horas para sobrevivir más que una secuela es en realidad un refrito mejorado del primer film.
El concepto de la producción original estaba bueno y era interesante para trabajar en una propuesta de este género. La trama transcurría en el año 2022, donde el gobierno norteamericano implementaba un programa llamado La purga. Durante un período de 12 horas todas las actividades criminales eran legales y los delincuentes podían hacer lo que quisieran, salvo dañar a los funcionarios del gobierno.
La nueva entrega funciona mejor por el hecho que el director DeMonaco esta vez decidió trabajar el conflicto en exteriores donde pudo sacarle más jugo al concepto de la purga.
En La noche de la expiación toda la acción se centraba en una casa que era invadida por unos criminales y el personaje de Ethan Hawke trataba de defender a su familia.
12 horas para sobrevivir logra construir mejor las situaciones de tensión y suspenso en las calles, que es el escenario donde tiene lugar el caos que genera ese programa gubernamental.
La trama también es un poco más elaborada, ya que gira en torno a la historia de varios personajes y desarrolla mejor la idea de la película original.
Frank Grillo, quien hace poco apareció en Capitán América 2 y el excelente drama de artes marciales Warrior, es el actor más conocido del reparto que no presenta grandes figuras.
En resumen, 12 horas para sobrevivir en un decente thriller del cine clase B que mejoró varios aspectos de La noche de la expiación y se deja ver si te interesó la historia previa.