No, no es excelente: hay una película con premisa parecida (Hazme reír, no estrenada aquí) que es mejor. Sin embargo, esta “tiene algo”. La historia es la de un joven que tiene que pelearle a un cáncer, y del amigo que lo ayuda. Entre los dos protagonistas -Joseph Gordon-Levitt y Seth Rogen- hay una química especial y el guión usa el humor para pelearle a la tragedia. Le gana por puntos, pero basta para que uno disfrute de la película y se le ría en la cara a la muerte.