Comedia romántica diferente, original, fresca, con buen ritmo.
Aquí las cosas entre los enamorados o desenamorados no van bien, se sabe desde el principio de la peli. Sabemos que no tendremos un final con un beso típico de las pelis de este género. Y nos adentramos en una historia contada de a cachitos, elegido muy bien el orden de éstos. A esto se le agrega la creatividad que posee para mostrarnos las etapas de la pareja, o mejor dicho del protagonista, ya saben, no se habla de una historia de amor, sino de los vaivenes sentimentales de Tom (Joseph Gordon-Levitt) con quien empatizamos.
Una original mezcla de recursos para contar el pasado, los pensamientos, los sentimientos, y volcar en imágenes (sin recurrir a esos forzados diálogos explicativos, o voces en off sin sentido) aquello que se siente cuando nos enamoramos y eso conlleva dolor.
Si bien esta contado como comedia, el tema esta planteado bastante profundamente como podría esperarse de un drama, pero con el guiño de frescura característico del género al que pertenece.
Videos caseros con cámara en mano. Animación. Por momentos pareciera que los personajes cobran vida desde el mismo storyboard. Y cómo dije antes, un ritmo exquisito. Dinámico. Preciso para cada cosa que se esta contando.
Y quiero destacar algo: esos fotogramas negros usados inteligentemente como modo expresivo y narrativo amalgamados perfectamente con el devenir de la historia. A mi criterio, esos planos, los “vacios”, la elección de ponerlos en esos momentos y con esa duración, son sumamente acertados. Y es que por allí dicen que un silencio a veces vale más que mil palabras. El equivalente de esa frase en un audiovisual, es precisamente un fotograma negro y silencioso. Y ese mismo fotograma negro, usado varias veces en la peli, aunque a simple vista pareciera el mismo, transmite cosas diferentes (algunas parecidas) según en que momento de la peli esta ubicado.
La interpretación de Joseph Gordon-Levitt esta por encima de lo que suelo ver en este género. Quizás no destaca tanto para mi gusto, la actuación de Deschanel, algo artificial me sonó por momentos y sin muchos cambios expresivos desde lo gestual. En cambio, él se luce, transmite muy bien lo que siente, y eso es merito de la cámara, muy bien ubicada, y mucho merito de él.
¿Que más les cuento de la peli? La verdad que es para hablar largo, me ha gustado muchísimo, y tiene montones de detalles para resaltar. Como punto negativo, poniéndome demasiado pretenciosa, hilando muy fino, re finísimo, sacaría dos o tres líneas de diálogos que me parecieron sacadas de una de las tarjetas (me viene como anillo al dedo para describirlo) que el protagonista diseñaba en su trabajo. Aún así, no molestan lo suficiente. No me refiero al nombre final, que es tema aparte.
El nombre final (los que la vieron saben de que hablo) aunque también pueda sonar “artificioso”, yo creo que es perfecto. Resumen de lo que quiere transmitir la peli, resumen de lo que esta aprendiendo nuestro protagonista. Y es que cuando abrimos los ojos, todas las fichas caen juntas, todo se ve claro de golpe, tan obvio, como el mismísimo nombre del que hablo.
Cabe agregar que en toda la peli hay delicadísimas referencias a muchas películas conocidas, hechas con gusto y además, narrativamente justificadas.
¿Algo más? Si, seguramente cada uno destacará algo diferente. Y una vez que la vuelva a ver, estoy segura que le voy a encontrar más sabor. No soy una amante de este género, no suelo encontrar en él pelis que me atrapen lo suficiente, y menos que quiera volver a ver. Esta es una excelente excepción.
¿Cuándo fue la última vez que les pasó eso con una comedia romántica? ¿Con cuál?
Definitivamente, no dejen de verla!!!