Una historia muy cruda. El film se puede dividir en tres partes. Por un lado lo que ocurre en Afganistán, una cuadrilla de militares de guerra daneses liderados por su jefe “Claus M Pedersen” en un lugar muy hostil donde el enemigo puede estar en cualquier rincón. Por otro en Dinamarca, con la esposa e hijos del coronel y la falta que hace la presencia de él. Y la tercera parte tiene que ver con el juicio militar que debe afrontar el mismo protagonista.
Una fiscal lo acusa de haber obrado mal al tomar una terrible decisión en momentos de guerra. Hay imágenes que duelen, en especial una donde se ve el cuerpito de un niño afgano sin vida y el detalle de sus piececitos . Esa fotografía cobrará un sentido aún mayor, cuando notamos el mismo encuadre, con otro niño en otra situación. Un detalle casi imperceptible cargado de sensibilidad donde se posa la mirada del director. Con un estilo narrativo que se toma sus tiempos. Estuvo nominado al Oscar como mejor película en lengua extranjera, pero no pudo quedarse con la estatuilla.