Acné

Crítica de Fernando Alvarez - Todo lo ve

Con deseo y sin ganas

“No son pecas, son granos” asegura Rafael Bregman, el adolescente de 13 años que lleva adelante esta historia rodada en Montevideo. Lo que más llama la atención de este film es la ausencia de hormonas, narrativas y de las otras, en una época de cambios extremos. Parado frente al espejo, lleno de granitos y con muchas ganas, empieza un periplo que lo lleva a debutar sexualmente con una prostituta. Y a visitarla asiduamente, aunque el beso del amor todavía no le llega...

El director Federico Veiroj centra la trama en un ámbito estudiantil y familiar de padres separados, pero lo transmite con tan poco entusiasmo en cada una de las escenas, que es capaz de bajar la libido del espectador más desprevenido.
Acné supone una sucesión de experiencias íntimas e intransferibles como la masturbación, la primera vez y el primer enamoramiento. Pero nada de eso sucede a lo largo de una hora y media.

Entre Percután, diálogos vacíos (propios de los adolescentes, pero poco funcionales en este relato) y lecciones de piano, la película muestra personajes apáticos, inmersos en un híbrido que no convence. Y que tampoco estimula las hormonas del público.

¿Dónde quedaron títulos conmovedores como El año del arco iris o la reciente película nacional El último verano de la boyita?...