Cuando llegó por primera vez a la pantalla fue toda una novedad y arrasó en taquilla. Ya en la cuarta entrega bajó su calidad y ahora en esta, que en realidad es la sexta entrega repite el modelo y no ofrece nada diferente. Se usa cámara fija y en mano, algo de exorcismo, sustos muy pocos, apenas cerca a los 10 minutos finales. Algo diferente es el 3D pero se puede ver también en 2D. No olvidemos la película “The Blair Witch Project” (1999) que puso de moda este tipo de terror hechas con grabaciones caseras y cámara en mano, a partir de ese momento aparecen una serie de películas con este esquema. Aquí la historia continúa se dice hasta la decima. Solo para fanáticos.