Cuando comienza el film se aclara que no está basado en ningún hecho real, que todo es una ficción y cualquier similitud con algún hecho de la vida real es pura coincidencia. Valiosa aclaración para descartar el parecido con el resonante caso de dos amigas Lucila Frend y Solange Grabenheimer ocurrido en el 2007.
Todo gira en torno a una joven acusada de haber asesinado a su mejor amiga, si bien su argumento tiene un tinte policial y de thriller, lo que vemos es la intimidad de una familia inmersa en el dolor y la fatalidad. Dolores Dreier (Lali Espósito, “Permitidos”, “Pelea de mi vida”), vive con su familia, tiene un muy buen pasar económico y ellos se enfrentan a la sociedad y a un juicio demoledor, todo indica que ella mató a su amiga durante una fiesta donde hubo alcohol, drogas, sexo, algunos excesos, y en la cual estaba prohibido el uso de celulares para evitar que se filme.
A partir que avanza el filme se puede observar la influencia de los medios, las redes sociales y las personas. Dolores se enfrenta a distintas situaciones psicológicamente complejas, acosada constantemente, resistiendo a: un duro juicio donde sale a la luz su privacidad, la rigidez del Fiscal Taboada (Gerardo Romano), las instrucciones de su abogado Ignacio (Daniel Fanego), las presiones de sus padres Betina y Luis (Inés Estévez y Leonardo Sbaraglia), la inocente mirada de su hermano Martin (Emilio Vodanovich, “Natacha, la película”), la contención de sus amigos Flor (Martina Campos, “Sres papis serie de televisión) y la mirada de un amigo casual Lucas (Lautaro Rodriguez, “Mi mejor amigo”), la entrevista con el dedo acusador de Mario Elmo (Gael García Bernal, “Neruda”) en un programa de televisión durante la cual ,cansada de todo, frente a cámara decide ser autentica y directa.
El film contiene un ritmo entre rápido y pausado, es visualmente impecable, con efectos de sonido muy logrados, es inquietante y se encuentra llena de: suspenso, sospechas, secretos, tensión e intriga, el espectador a medida que corren los minutos comienza a involucrase entre la inocencia o la culpabilidad. Con respeto a los personajes la actriz y cantante Lali Espósito enfrenta su primer papel dramático que tiene una gran carga, que se refleja a través de sus movimientos y miradas, por lo tanto su interpretación es correcta, solo por momentos un poco acartonada pero se apoya bien en los personajes de Inés Estévez, esa madre contenedora, que tolera y cuida su hogar, Sbaraglia el padre que lucha con los obstáculos y ellos como padres viven en un verdadero infierno, en todos los sentidos.
Resulta atractiva la construcción de los personajes secundarios: genial Daniel Fanego ese abogado al que le ocultan algunas cosas y debe salvar a esta joven, controla todo y sus honorarios son altos; una participación acotada por el lado de Gerardo Romano, correcto y Gael García Bernal, algo sobreactuado.
Un film correcto que resulta atrapante, con un buen movimiento de cámara, logra buenos planos y la destacada fotografía de Fernando Lockett (“Temporada de caza”). “Acusada” pasó por el Festival de cine de Venecia, el de Toronto y ahora llega a los cines argentinos.