Contradicciones
Adopción se basa en una historia real situada dentro de la última dictadura militar. Un hecho que da lugar a la historia de Ricardo, un gay que vive en pareja con José, y decide adoptar a Juan, un niño de 8 años abandonado en un orfanato. La identidad de Juan será un interrogante a descubrir por Ricardo quien comienza a ahondar sobre el pasado del niño.
Lypszyc hará referencia no sólo a una etapa monstruosa de nuestra historia sino también abordará la homosexualidad masculina en su deseo de formar una familia dentro de una realidad político - social represiva y excluyente.
Sin embargo, si en Adopción el interés de los temas es lo fuerte y lo que Lypszyc desea resaltar, construir un relato desde la ficción sería adecuarlo a mayores elementos y formas narrativas que podrían jugarle en contra. Hacerlo desde el documental se ajustaría más; pero el film no opta ni por una cosa ni por otra, sino a una suerte de ambos registros que forman “un falso documental”; o sea se inventa todo, desde los entrevistados hasta las entrevistas mismas, los lugares como las filmaciones caseras que se intercalan en todo momento. De esta forma, toda la historia se termina ficcionalizando bajo una estética y una narrativa visual que simula ser lo que no es.
Además de ciertos tropiezos dentro del guión, respecto a quienes eran los padres del niño y lo que hicieron de él, los temas principales se terminan desdibujando, el film se vuelve un producto híbrido. Una contradicción dentro de un discurso destinado a develar mentiras y reconstruir identidades.