Hay películas que son apenas la ilustración de una obra teatral o un campeonato (casi televisivo) de interpretaciones “intensas”. Agosto es su paradigma: la historia de una reunión familiar alrededor de una madre monstruosa no es más que un montón de lugares comunes que el espectador puede disfrutar o padecer solo en la medida en que le caigan bien -desde antes- los actores. Sí, Meryl Streep actúa muy bien: el problema es que se nota que actúa.