En la época de la Gran Depresión, un joven estudiante de veterinaria (Robert Pattinson) se ve obligado a dejar sus estudios tras la muerte de sus padres, y empieza a trabajar en un circo como veterinario y encargado de los animales.
El joven se enamora de una acróbata (Reese Witherspoon) que está casada con el dueño del circo (Christoph Waltz), un hombre violento que hará lo imposible por separarlos.
La llegada de una elefante unirá aún más a los amantes, pero todo se volverá aún más complicado.
El joven Pattinson aporta su presencia dignamente como héroe romántico, junto a Witherspoon que, en este filme al menos, no sobresale demasiado. El gran Christoph Waltz (ganador del Oscar por "Bastardos sin gloria") tiene que hacer de malo bien malo (y le sale bien). Es de destacar la cuota emotiva aportada por el legendario Hal Holbrook, personaje que abre el filme y se constituye como narrador de la historia.
Si bien "Agua para elefantes" no es nada original, hay suspenso, romance y drama en justas dosis, a pesar de lo arquetípico de sus personajes protagonistas. Es destacable la dirección de producción y la excelente ambientación de época que, junto a la fotografía, hacen del filme un digno entretenimiento, agradable de ver. A pesar de parecer predecible (por lo antedicho en cuanto a lo arquetípico de los personajes y su accionar), hasta último momento no se sabe si terminará bien o mal, lo que aumenta la expectativa y genera gran parte del interés.