Acá tenemos otro claro ejemplo de cómo un trailer puede distorsionar por completo la propuesta que ofrece realmente una película.
Si mirás el avance de Al filo de la oscuridad parecería que es un refrito de Búsqueda Implacable (Liam Neeson) y lo cierto es que no tienen nada que ver.
El director Martin Campbell (Golden Eye) y Mel Gibson ofrecen un gran policial mucho más dramático de lo que mostraban los trailers.
No es una obra maestra, ni un film que brinde una propuesta sin precedentes, pero hay algo que no se le puede discutir: Es un policial sin discusión.
Frente a las pedorradas que se estrenan en estos días dentro de este estilo, lo celebro.
La historia está basada en una importante miniserie inglesa que paralizó al Reino Unido cuando se estrenó en la televisión y que el propio Martin Campbell dirigió en 1985. También es muy recordada por la música de Eric Clapton.
En este caso, Campbell y Gibson (que también es productor) tomaron la trama y la desarrollaron en el estilo de los viejos policiales norteamericanos de la década de ´70. Me pareció interesante como un director tomó un viejo trabajó suyo y lo reinterpretó desde una óptica totalmente diferente.
No esperés ver Arma Mortal o a Mel emulando a John McClane porque esto pasa por otro lado.
De hecho, tampoco hay grandes secuencias de acción Hollywoodenses, pero la violencia y los tiroteos fueron trabajados de un modo más realista y brutal.
El personaje de Gibson no sale a buscar solamente justicia por mano propia tras el asesinato de su hija. Matar a los asesinos es fácil, lo complicado es encontrar la verdad y ahí es donde la historia se pone interesante.
El protagonista, que ya esta jugado en la vida, va más allá de la venganza y la película se vuelve más atractiva cuando entra en el terreno de las conspiraciones políticas.
Acá la resolución del misterio es más importante que la venganza.
El director Campbell carga todo el film en las espaldas de Gibson, quien está presente en el 95 por ciento de las escenas, rodeado de un buen reparto donde se destaca principalmente Ray Winstone, con un personaje que originalmente iba a interpretar Robert DeNiro.
Gibson volvió a la actuación con un típico personaje de esos que interpretaban Clint Eastwood y Charles Bronson en los ´70 y está en su salsa en esta historia donde sobresale con su personaje en los momentos dramáticos.
Ya sea que sos seguidor de Mel o del género Al filo de la oscuridad es una apuesta segura y brinda un buen entretenimiento.