Vení que yo te explico
Un Oliver Stone didáctico para contar quién es Hugo Chávez a los espectadores estadounidenses.
Oliver Stone -visitante hoy de nuestro país- ya le había tomado el gusto al documental político con sendos trabajos sobre Fidel Castro. Y como en la ficción de JFK , el director de Pelotón es didáctico en Al sur de la frontera , un filme que para los que vivimos al sur de ese límite que marca su título no trae ninguna novedad, pero que para los compatriotas de Stone parece una toma de conciencia necesaria.
Como si fuera Michael Moore, Stone se pone delante de cámara, entrevista o habla en off. No tiene el timing ni el desenfado del realizador de Bowling for Columbine , pero se las arregla para marcar su punto de vista unívoco. Igual que lo que hace Moore.
No es obra de la casualidad que ambos directores apunten sus dardos contra cierta prensa estadounidense, que tergiversa datos e imágenes televisivas. Stone da nombres y muestra extractos de The New York Times o emisiones de la CNN referidas a Hugo Chávez, que es retratado por varios medios como un dictador enemigo de los EE.UU.
Porque Al sur de la frontera se centra en el presidente de Venezuela, pero la cámara de Stone va rotando. Enjuicia a los medios por un lado, pero también va más allá al comprender que hay un correlato en Sudamérica con otros presidentes democráticos, de “espíritus bolivarianos”. Y dice: “Hay un problema con la democracia que se practica en el sur: puede crear políticos que se nieguen a aceptar los mandatos de Washington”.
A partir de allí seguirá al ex oficial militar luego de haber intentado un golpe de Estado, y que sufrirá él mismo otro golpe. Y presentará al FMI como “controlado por el Ministerio de Hacienda de EE.UU., usando como conejillo de indias a Sudamérica para sus experimentos económicos”.
Como se ve, ninguna novedad para el público de estos lares. Sí es provocativo el montaje y la manipulación de imágenes acerca de la represión a chavistas. Tras presentar a Venezuela como el tercer país en abastecimiento de petróleo, y que en los primeros seis años de gobierno de Yávez , como lo pronuncia Stone, la economía se duplicó, y que Yávez trabaja hasta las 2 de la mañana, Stone inicia su recorrido por Bolivia, Paraguay, Brasil, Ecuador y, claro, la Argentina.
Y se sabe: en la Quinta de Olivos entrevistó a Cristina y Néstor Kirchner, y a la Presidenta le formula la famosa pregunta de ¿ Cuántos pares de zapatos tiene? “Ah no sé, nunca los conté. Nunca le preguntaron a un hombre cuántos pares de zapatos tiene”, le responde.
Pero el tono es amable. Con Kirchner habla de ”su heroísmo” en la Cumbre de las Américas en Mar del Plata. “Ese día no me lo voy a olvidar nunca en mi vida. Tanto que tengo el sillón de esa reunión guardado en mi casa en Calafate”, dice Kirchner en confianza.
A partir de esa confianza es que Stone hizo su documental, más necesario al Norte de esa frontera.